Copenhague se ha convertido en el escenario de una de las manifestaciones artísticas más singulares de Europa con la celebración de la mayor carrera de arte lumínico del mundo, que tuvo lugar en el marco del Festival de Luz de Copenhague. Más de 1.300 corredores participaron en este evento, transformando el histórico puerto de la ciudad en una obra de arte en movimiento.
Los participantes, envueltos en cadenas de luces brillantes, recorrieron un trayecto de 7 kilómetros que los llevó a través de 16 instalaciones artísticas, mientras que una ruta de 3 kilómetros estaba destinada a familias con niños. El evento tuvo lugar en una noche fría, pero el ambiente se calentó con los gritos de alegría de los asistentes, especialmente en Nyhavn, el icónico paseo marítimo del siglo XVII, donde los corredores pasaron junto a coloridas casas históricas.
Jesper Kongshaug, uno de los organizadores de la carrera, destacó que el hecho de que los corredores fueran fuentes de luz en movimiento añadía una nueva dimensión a la experiencia. «Lo que hemos estado haciendo es, por supuesto, precisión, y ahora todas estas posiciones se vuelven relativas a las personas que se mueven. Es una buena dimensión adicional a todo lo que se ha añadido hoy. Y la gente está feliz. No podía escuchar nada más que a la gente sintiéndose tan feliz y segura», afirmó Kongshaug.
Los testimonios de los participantes reflejan la euforia del evento. Søren Frost, un corredor de 60 años, expresó su entusiasmo: «Fue genial. Con todos corriendo y con todas sus luces, fue muy hermoso. Y fue una nueva forma de ver nuestra ciudad. Genial. Definitivamente lo haré de nuevo el próximo año». Otra corredora, Vanessa Vega Saenz, también compartió su alegría: «Fue increíble. Simplemente me siento feliz. Correr con 1.200 personas y todos sonriendo. Y la gente que no corre también sonríe. Así que realmente creo que esto contribuye a la felicidad en Copenhague, mi ciudad. La amo».
La carrera de luz es solo uno de los muchos eventos que componen el Festival de Luz de Copenhague, que presenta más de 50 instalaciones lumínicas en toda la capital danesa, superando a cualquier otro festival de su tipo en Europa. En total, alrededor de 400.000 personas visitan el festival cada año, lo que lo convierte en uno de los eventos gratuitos más grandes de Dinamarca.
El festival concluirá el 23 de febrero, pero tanto la carrera de luz como todos los eventos relacionados se repiten anualmente en este mes, consolidando a Copenhague como un centro de innovación y creatividad artística en el ámbito del arte lumínico.
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