Después de estar en el front row del desfile primavera-verano 2025 de Dior por Maria Grazia Chiuri, nos sentamos a platicar con Thalia, cantante, actriz, empresaria e ícono de la cultura pop latina. Nos contó un poco de todo: desde su legendaria boda y el vestido de novia Dior que nunca fue (y por qué), hasta la autenticidad y el empoderamiento femenino que la caracteriza, pasando por la evolución de su estilo personal y el legado de su carrera a las nuevas generaciones.
SANTIAGO NUÑO VILLASEÑOR (SNV): ¿Sabías que es imposible para un mexicano pasar por la catedral de San Patricio en Nueva York y no decir: “Ahí fue donde se casó Thalia”. ¿Cómo fue elegir ese vestido de novia de Mitzy? ¿Es verdad que iba a ser Dior?
THALIA (T): Para ese día tan importante tuve la oportunidad de escoger entre los diseñadores más importantes para hacer mi vestido de novia, incluyendo la opción número uno, Dior, después Vera Wang y otros. Pero ya sabes que cuando te casas de forma tradicional te dicen que tienes que llevar algo nuevo, algo usado… Por eso, quería llevar algo hecho por un diseñador que me conociera bien, y fue por eso que elegí a Mitzy. Desde el principio me ayudó mucho en mi carrera, a crear looks que tenía en mente y él los confeccionaba y me quedaban perfecto, era como mi cómplice, por eso fue importantísimo que él hiciera mi vestido de novia. Además, yo quería que tuviera una cola kilométrica porque me impactó mucho el vestido de la princesa Diana. Lo hizo con seda importada, bordados de plata y perlas, por lo que fue un proceso larguísimo, pero cuando me lo puse ese helado día de diciembre de hace 24 años, me sentí envuelta en el vestido que desde chica había soñado. Así que al final no fue Dior porque tuvo un significado más personal.
SNV: ¿Cuál es tu primer recuerdo de Dior? ¿Tienes alguna pieza especialmente significativa?
T: Mi primer recuerdo con Dior fue en la recámara de mis hermanas. Soy la menor de las cinco. Ellas coleccionaban revistas de moda y recreaban modelos que veían en las fotos, entonces aprendí de ellas, y en una de las revistas venía una editorial de moda con un vestido Dior de encaje negro sobre un lamé rosa salmón con un moño que me fascinó. Ya estaba más grandecita, así que arranqué la página y se la llevé a la modista de mi colonia para que hiciera el vestido para mi fiesta de 15 años. Siempre he querido romper con los moldes, en esa época la moda era el clásico vestido gigantesco, tener la gran fiesta y el pastel, pero no era para mí; yo quería un vestido pegadito de falda tubo y escotado. Tuve una ceremonia en la iglesia y de ahí nos fuimos a una disco.
SNV: ¿Cómo vives el feminismo que Maria Grazia Chiuri propone para Dior?
T: Me inspira mucho Maria Grazia porque está conectando con este importante mensaje de igualdad de género y empoderamiento de la mujer a través de la moda. Se me hace maravilloso que tome esta oportunidad con tal fortaleza y viva el feminismo abrazando la individualidad. Yo lo hago también, apoyándome en mis fortalezas, usando mi plataforma para resaltar la importancia de las mujeres en todos los ámbitos, así es como vivo el feminismo. Creo que la moda puede transmitir un mensaje de poder, seguridad, aceptación y reinvención. Puedes ser diferentes versiones de ti misma al mismo tiempo, porque a través de la moda tu estilo va evolucionando. Todo depende del momento de la vida en el que te encuentres.
SNV: ¿Cómo ha evolucionado tu estilo personal y cómo lo describirías ahora?
T: Mi estilo es arriesgado. Es un estilo coqueto, femenino, actual, honesto y original. Siempre trato de aterrizar mis ideas en papel y buscar a quien pueda diseñar lo que traigo en mente, y así fue como poco a poco fui encontrando a mi equipo. Así es como mi estilo ha evolucionado, pero la esencia es la misma —me refiero a la autenticidad— a tratar de ser diferente por convicción, no por querer llamar la atención, sino porque a mí me gusta usar cosas extravagantes. Me gustan las telas coloridas, los bordados, los brillos, las capas, las colas largas, las aberturas en las piernas y todo lo exagerado. Todo eso es muy mío. Además, siempre intento meter mis símbolos como el corazón, la cruz egipcia y las coronas; cosas que concuerdan con mi pensamiento en las diferentes facetas de mi vida; con mi evolución emocional y espiritual. Hay mucha evolución, pero la esencia es la misma.
SNV: ¿Qué es lo que más disfrutas de la relación que existe entre la música y la moda?
T: Me gusta la diversidad. Es decir, que puedo jugar con diferentes estilos, diseñadores y visiones con cada pieza para cada canción. Cada vestuario puede contar la historia de la canción, de la letra que quiero transmitir a la persona que me ve en un video musical o en una foto. Es todo un universo, un imaginario que marca a la persona. Entonces, para mí es muy importante que lo que use tenga coherencia con la letra, la música y la emoción que tiene mi voz en esa interpretación. Puedo usar unos jeans con una blusa blanca y tenis, como hice en mi concierto de Primera fila, porque era precisamente muy vulnerable, con letras muy sensibles. No podía interpretar eso con un vestido pegado y escotado, porque cada canción tiene una historia que contar y yo uso la moda como una aliada en mi carrera.
SNV: ¿Cuál dirías que es una prenda o accesorio emblemático “muy tú” y por qué?
T: La silueta a la que siempre regreso es el body con corte alto en la pierna y con media falda grande atrás, como el look de mi disco Love, que tenía un body chiquito rojo con escote corazón y una cola negra. Es un look muy recurrente porque me siento como soy: me siento sexy, empoderada, fuerte, atrevida, dueña de mí y de mi cuerpo, contenta, agradecida y orgullosa de ser quien soy. Justo en el encendido del árbol de Navidad en el Rockefeller Center en Manhattan, me invitaron a cantar mi disco de Navidad, y regresé a ese body porque esa prenda me hace sentir yo. Me da la fuerza de prender ese switch y decir: “Aquí esta Thalía, bien puesta”.
SNV: ¿Cómo es tu acercamiento con la Gen Z que nunca te vio en televisión?
T: Yo siempre fui muy nerd, muy tecnológica. Era la que siempre arreglaba los aparatos en la casa. Entonces, cuando llegó la computadora, la era de MySpace, Facebook y el punto com, hice mi sitio web, thalia.com, y así fue como empecé a bloguear y a hacer mis selfies, después mis historias en Instagram. Empecé con los blogs, así que fue muy orgánico cuando pasó a las redes sociales porque ya tenía esa base de fans que me seguía. La tecnología es una herramienta que me ha ayudado a conectar con diferentes generaciones a través de Facebook, Instagram, pero también YouTube y TikTok, y me ha permitido integrarme realmente a nuevos puntos de vista, visiones y conversaciones.
SNV: ¿Cuál te gustaría que fuera tu legado para las nuevas generaciones?
T: Me siento feliz con la mujer en la que me he convertido, entonces vivo en agradecimiento. No importa lo que yo emprenda, ya sea música, actuación, moda, joyería, accesorios para el hogar o lo que sea; todas estas empresas tienen la identidad de Thalia, lo que significa que puedes lograr todo lo que esté en tu mente y en tu corazón. Prepárate, estudia, aprende y ve por ello, no hay imposibles. Pero, sobre todo, sé auténtico, sé tú. Ámate, respétate, quiérete. Eso es lo que yo quiero dejarle con mi trabajo a estas generaciones y a las que vengan: que todo es posible si eres genuino, si te amas y te respetas.
SNV: ¿Cuál de tus canciones o letras crees que resuena más contigo y por qué?
T: Cada una es buena para cada momento y cada emoción, pero me gustan dos. Una que me encanta, se llama “Flores secas en la piel”, que es de Love, uno de mis primeros discos. Me encanta porque habla de la vida, de que mañana vas a tener los años plasmados en la piel como manchas de flores secas. Tienes que vivir la vida con toda la pasión, con todo el amor, con todas las experiencias y no quedarte con ganas antes de que llegue ese momento. Esa canción me recuerda a eso y me encanta escucharla. Y la otra es “Arrasando”, porque todo es positivo, todo es tú puedes, todo es emprendedor, todo es tú primero. No importa lo que digan de ti, no importa que te critiquen, tú sigue tu camino, sigue adelante y sigue arrasando con la vida siempre.
SNV: ¿Cuáles han sido tus proyectos musicales más recientes? ¿Qué nuevos proyectos tienes en puerta?
T: En 2024 hubo mucha música y cosas increíbles. En Miami, durante el verano, se me ocurrió escribir un disco navideño. Cantarlo en diciembre fue una caricia al corazón porque ha sido un tiempo complicado, muy difícil emocionalmente, y sin saberlo, el disco Navidad melancólica cayó como una bendición y el camino ya venía preparado para que sucediera. Ahora, me emociona mucho empezar el año con música y me emociono todavía más porque ya estamos coordinando varias salidas de sencillos y eso es algo que me tiene contenta. La música es algo que me mantiene en sintonía y en movimiento, porque siempre hay una colaboración con la que aprendes de un cantante nuevo, un compositor o un productor. Siempre hay un estilo de música que tratar, una fusión de ritmos que crear o una coreografía que inventar. La música siempre tiene algo que regalarte y por eso estoy feliz de poder seguir creando música siempre.
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